¿Cómo saber si mi bebé tiene sueño y está listo para ir a dormir? 

Si bien tu pequeño aún no habla, es capaz de comunicarte cuando se siente cansado, listo para dormir o demasiado exhausto para quedarse dormido. Aprender a reconocer las señales de sueño de tu bebé es muy importante para evitar el sobrecansancio. Ya que, a diferencia de los adultos, los bebés se vuelven hiperactivos cuando están demasiado cansados y, por ende, tienen muchas dificultades para un buen dormir. 

Las señales de sueño de tu pequeño

Te has preguntado por qué tu bebé no puede dormir aún cuando está exhausto. La respuesta es que cuanto más agotado, peor dormirá y más difícil le será conciliar el sueño. Ya que a un bebé sobrecansado se le dificulta mucho conectar sus ciclos de sueño y, por lo tanto, experimentará con mayor frecuencia despertares nocturnos y siestas cortas. 

Por el contrario, un bebé bien descansado duerme más, concilia el sueño con mayor facilidad y se despierta menos durante la noche. 

Entonces, como tu pequeño no puede expresar con palabras cuando se siente cansado es esencial saber leer las señales que te da, sobre todo, en la etapa de recién nacido cuando aún no se han consolidado las siestas y el sueño nocturno. Después de los 3 o 4 meses de vida, es necesario un equilibrio entre reconocer las señales de sueño y poner atención a las ventanas de sueño según la edad de tu bebé. 

Señales de que tu bebé está cansado: 

• mirada fija
• cejas rosadas
• mirada perdida

Señales de que tu bebé está listo para la siesta o dormir por la noche: 

• agitación
• bostezos grandes
• se frota los ojos

Señales de que tu bebé está sobrecansado: 

• gritos
• cuerpo rígido
• te empuja

Ten en cuenta que esta lista te ayudará de manera general, ya que todos los bebés son distintos y desarrollan su propia combinación de señales para expresar lo que necesitan o cómo se sienten. Con el tiempo, lograrás identificar la forma en que tu pequeño se comunica contigo y sabrás si es hora de hacerlo dormir. 

Tips para evitar el sobrecansancio y mejorar el sueño de tu bebé

Identifica si tu pequeño está sobrecansado

Un bebé descansado está de buen humor, se duerme con facilidad, tiene buen apetito, se calma fácilmente y tiene siestas reparadoras. En cambio, a un bebé demasiado cansado le cuesta quedarse dormido, no duerme bien por la noche, muestra poco interés, tiene pataletas frecuentes, experimenta siestas cortas y falta de apetito. 

Adelanta la hora de la siesta

Apenas tu pequeño te muestre señales de que está listo para hacer su siesta, no esperes a que esté sobrecansado para hacerlo dormir. Adelanta la hora de su siesta y así podrá estar relajado para conciliar el sueño y dormir más. 

Rutina antes de dormir para el sueño diurno y nocturno

Mientras más cansado está tu bebé, más lucha contra el sueño. Esto lo lleva a experimentar siestas cortas (entre 30 a 40 minutos) e, incluso, es muy común que alrededor de las 11 o las 11:30 p.m. se despierte. Entonces, al estar sobreestimulado, es posible que ni una leche lo calme y tenga problemas para volver a dormirse.

Una parte muy importante de la rutina antes de dormir es el momento en que tu pequeño logra relajarse. Dedica tiempo a que esto ocurra: baja las luces, cántale canciones calmadas o puedes mecerlo leyendo un libro.

Cuando tu bebé tenga una siesta muy corta, hazle una buena rutina de relajación antes de acostarlo por la noche y, si ves que está muy cansado, adelanta la hora de dormir unos 30 minutos.

Siestas en casa

Si notas que tu hijo o hija sigue frecuentemente un patrón de cansancio excesivo, de ser posible, procura que las siestas sean en su lugar habitual. Pon, siempre, mucha atención a sus ventanas y señales de sueño.

Acuesta temprano a tu bebé por las noches

Tu pequeño dormirá mejor, durante más tiempo y llorará menos si lo acuestas temprano, una buena hora es entre las 7 y 8 pm. Si lo haces dormir muy tarde, estará demasiado cansado y estresado para conciliar el sueño. Esto se debe a que, después de las 8 pm, tu bebé tiene un aumento de cortisol (la hormona del estrés), por lo que su energía también se intensifica. 

Entonces, cuando esto ocurre y tu pequeño aún está despierto, provocará que la hora de dormir sea muy difícil aún cuando esté realmente exhausto. Si generalmente lo acuestas después de las 9 o 10 pm, adelanta unos 15 minutos la hora de acostarlo durante 4 días, y comenzarás a ver resultados.